Recordar a Don Reylí

Recordar a Don Reylí

Recordar a Don Reylí es tener en la mente a una persona siempre sonriente, amable, dispuesto a ayudar, lleno de historias que contar, siempre listo para platicar, preparado a saludar...
Recordar a Don Reylí es verlo sentado a la puerta de su casa en el barrio de Tecomajiaca, mi niñez no estaría completa sin que el saliera a relucir como cuando a su alrededor estábamos muchos chamacos del barrio escuchando anécdotas de su vida y de Teapa...
Recordar a Don Reylí es acordarte también de Chepedo, Cuco, Nico, Nando, Yadira, Tita, Kiro, "lizabe", Chuja, Rosita, Verónica y Manuel. Claro por su puesto Doña Trina...
Recordar a Don Reylí es saber que de él aprendiste a usar el tirador, pescar pigüa y mosho, a nadar en el rio, a cachar con un guante de béisbol, a sentir miedo por sus historias del duende...
Recordar a Don Reylí es pensar en una persona humilde, luchadora y que recibió la vida con mucha tranquilidad y feliz de lo que viniera, fuera o pasara...
Recordar a Don Reylí es saber que te estimaba aun cuando el tiempo hubiera avanzado y nunca lo hubieras visitado...

Hace unos días se nos fue, a un mejor lugar quizá, aunque creo que él ya estaba en el paraíso porque vivía la vida con tanta sabiduría y tranquilidad y se que Tecomajiaca no lo olvidará nunca.

Hasta luego Don Reylí...

Monterrey NL, 02/11/2012
Balix